MESA DE CIERRE DE LA 2º JORNADA DEL EQUIPO DE NIÑOS DEL HOSPITAL ALVAREZ 2013

Lic. Susana Sujarchuk.



*Trabajo presentado en la 2º Jornada del Equipo de Niños del Hospital Álvarez: “La Infancia en los Márgenes” (2013).



Agradezco poder compartir y participar en estas jornadas que producen un intercambio rico de la clínica y la práctica hospitalaria y en diversas instituciones públicas.

A partir de la lectura de los trabajos presentados en la mesa  sobre  adolescencia en   los márgenes; entre la violencia y la segregación

Recordé un texto de Walter Benjamin

El artículo está escrito entre las dos grandes guerras del siglo XX, casi al inicio de la segunda guerra, cuando el clima empezaba a tornarse irrespirable, y opresivo…

El  escrito se llama Experiencia y pobreza (1)… y comienza con un relato de un breve cuento:

"En nuestros libros de relatos está la siguiente fábula: Un anciano en su lecho de muerte le dice a sus hijos que en su viña, viñedo, hay un tesoro escondido. Solo tienen que cavar. Cavaron, pero ni rastro del tesoro. Sin embargo cuando llega el otoño, el viñedo aporta como ningún otro en toda la región.

Entonces se dan cuenta que el padre les legó una Experiencia: la bendición no está en el oro, sino en la laboriosidad.”

Benjamin se pregunta:   ¿dónde quedó todo eso, donde quedaron los relatos, las narraciones?   Acaso plantea,  ¿ los moribundos, dicen palabras perdurables que se transmiten como un anillo de generación en generación?  ¿A quién le sirve hoy la ayuda de un proverbio?  ¿Quién intentará habérselas con la juventud apoyándose en la experiencia?

Afirma: la cosa está clara: la cotización de la experiencia ha bajado.

Se refiere entonces a que las personas  están plenas de Vivencias pero no pueden hacer de eso Experiencia.

Vincula sus reflexiones, a la manera en que regresaban  las personas   del campo de batalla de la primera guerra mundial,  volvían mudos.,.. pobres en cuanto a poder comunicar sus  vivencias ,  subraya: no podían tomar la palabra que mana de la boca al oído.

Una pobreza del todo nueva ha caído sobre el hombre, al tiempo que el enorme desarrollo de la técnica.  Y se pregunta de qué vale la técnica si no se une a la experiencia.

A que lleva esto, cuestiona : A comenzar desde el principio, a empezar de nuevo, a pasárselas con poco, a construir desde poquísimo, y sin mirar ni a diestra , ni a siniestra.

Llama a ese período del siglo XX, como una época que se caracteriza por una total falta de ilusión.

Cito: “Nos hemos hecho pobres, hemos ido entregando una porción tras otra de la herencia de la humanidad, con frecuencia teniendo que dejarla en la casa de empeño por cien veces menos de su valor, para que nos adelanten la pequeña moneda de lo actual”

Este texto, me pareció muy elocuente porque enhebra un hilo que hilvana y vincula a las  presentaciones.

Las tres tratan de hacer de las vivencias, experiencias. Por medio de reflexionar sobre el orden simbólico, sobre la ley, sobre las prácticas de lenguaje, y de intervenciones discursivas que posibiliten lazos sociales

Como por ejemplo, en el escrito presentado por Carolina Fernandez  y Mariela Williams que  narran  la práctica realizada en el Centro de Salud y en la atención Comunitaria; en el trabajo con grupos, para dar potencia a la palabra y poder rescatar la dimensión subjetiva en poblaciones que sufren la segregación.

El problema de la segregación también es presentado en  el trabajo de Adolescentes violentos, adolescentes desalojados de Marisa Lourido donde hay una  referencia al malestar contemporáneo, señalando que hay una diferencia entre el malestar y la segregación,  Esta última es la que no tiene inscripción en el orden simbólico,  lo que es rechazado del discurso de la época y entonces plantea la necesidad de pensar , retomando a  Laurent,  la no existencia actual de rituales apropiados que posibiliten  a los jóvenes violentos  encontrar salidas que no sean autodestructivas o destructivas para los demás.

Específicamente en el  trabajo de Nora Doukler del Grupo Olmo sobre Niños y adolescentes con conductas sexuales violentas, una clínica posible? Se retoma con insistencia el planteo de W Benjamin,   sobre si nos hemos vuelto pobres en experiencias… en  palabras que manan de la boca al oído, porque justamente hay una búsqueda en el material por la eficacia de la palabra: En la presentación clínica se subraya que la analista invita al paciente-procesado a decir lo silenciado…lo que a él le pasó con lo vivido.

Así como, retomando a Legendre,  formulan que la intervención de la Ley puede ejercer una función clínica. Que a través de los procedimientos del Derecho se da una primera escritura a lo traumático, se pone en palabras el horror y se propicia que el niño o joven se haga responsable de su acto, interrogándolo.

Como contrapunto de los trabajos sobre violencia  y adolescencia en los márgenes., quisiera señalar que:

Los trabajos de Instantáneas del primer encuentro con un niño de Carolina Barrionuevo. Fobia vs miedos en la infancia de Belén Tarulli y Los miedos,  ¿un compás necesario en la composición de la constitución subjetiva? De Maria Gabriela Mundiñano.

Son  una invitación a pensar los tiempos inaugurales, los primeros tiempos que van del infans a la infancia.

Sabemos sobre la importancia que tiene, el lugar que el niño ha tenido en el deseo de los padres.

Los escritos nos presentan elaboraciones sobre el lugar de la angustia, los miedos y la fobia en la constitución subjetiva del niño; y el espacio de juego como propiciatorio, como artificio, palabra que proviene del término latino artificium que reúne ars, arte, más facere, hacer.

Entonces el juego es un artificio en el sentido de arte de jugar, a la manera de aquel hacer ingenioso que instituye su diferencia y designa cierta creación que transforma o disfraza porque destaca que su operatoria sustituye lo real. El niño tiende apuntalar sus vivencias y situaciones imaginadas en cosas palpables y visibles del mundo real. (2)

Fundamentalmente el escrito de Maria Gabriela Mundiñano se centra en una esta temática de elaboración teórica sobre  la articulación entre la angustia y  la fobia. Trabajando con la  metáfora de la composición musical, puede pensar sobre la cuestión del tiempo, la espera y los silencios; en ese sentido el síntoma  hace ruido para el sujeto.

Los otros dos trabajos nos muestran de manera significativa la importancia del juego en el análisis con niños, juegos que se entraman a lo singular por la lectura que el analista hace de ellos.

Se lee en la producción de Carolina Barrionuevo quién   nos indica a partir  de la  presentación de diferentes viñetas, como el  juego muestra la posición del niño en relación al Otro, su modo de goce y su relación al saber  como brújula hacia donde orientar la dirección de la cura.

Así como también lo propone Belén Tarulli, la necesidad de otorgarle al niño un lugar de sujeto, privilegiando el texto y el discurso que  le dirige al analista.

Los materiales presentados, muestran el despliegue de  la cura: en un de ellos; el juego anudado a la transferencia permite la salida de la fobia y en el otro posibilita, que en el análisis, el niño revele  un secreto familiar.

Hoy hemos compartido una jornada de trabajos escritos que articulan la práctica clínica con la elaboración teórica. Por eso a modo de cierre y apertura para seguir pensando quisiera compartir con ustedes algunas  reflexiones de Michel de Certeau (historiador, lingüista, psicoanalista francés) (3)  sobre la escritura propia del psicoanálisis, específicamente la de Freud.

Él plantea que, el discurso freudiano no se substrae a los mecanismos que descubre en sus objetos, no está exento de ellos, como si ocupara la posición privilegiada de un observador. Elucida un funcionamiento al que él mismo está sometido.

La escritura freudiana, hace lo que dice, es realizativa.

La práctica productora del texto es la teoría, hacer texto es hacer teoría en el procedimiento narrativo de sus escritos, se muestra la practica misma del análisis, lejos de ser una lenguaje univoco y cerrado, con un objeto predeterminado.

Al texto, al que parece faltarle la seriedad de lo científico, se debe más bien a que toma con seriedad el funcionamiento dialógico de la cura.

En Estudios sobre la histeria, Freud formado en diagnósticos locales y en electrodiagnósticos, se asombra muy irónicamente, que sus historias sobre enfermos se lean como novelas, que están desprovistas de su carácter serio de cientificidad. Eso lo vive como un problema. Su manera de tratar la histeria transforma su manera de escribir. Metamorfosis de discurso, Cito a Freud: “El diagnostico local y las reacciones eléctricas no tienen ningún valor para el estudio de la histeria, mientras que la presentación (Darstellung) profunda de los procesos psíquicos a la manera en que nos son presentados por los poetas, me permite por el empleo de  algunas raras fórmulas psicológicas alcanzar una cierta inteligencia en el desarrollo de las histerias” Texto: Estudios sobre la histeria.

DeCertau  lo define como desplazamiento hacia el género poético o novelístico, la conversión psicoanalítica es una conversión hacía la literatura.

Porque?  Porque la regla de oro de todo tratamiento psicoanalítico contradice una norma primera y constitutiva del discurso científico positivista que quiere que la verdad del enunciado sea independiente del sujeto locutor.  A la inversa, para el psicoanálisis, el lugar del locutor, es decisivo y  está determinado por los afectos.

Por eso Freud, reintroduce lo que el positivismo rechaza, el discurso sobre la subjetividad que retomo la literatura.

DeCerteau lo va a llamar una estilística de los afectos, que Freud trabaja a su manera en forma  de pulsiones.

Confesar los afectos, es también reaprender un lenguaje nuevo, condenado por la racionalidad científica y reprimido por la normatividad social.

Pero tampoco  el texto psicoanalítico es puramente literario, por qué? Porque se apoya en el decir del otro, en el testimonio. El recurso al otro genera efecto de credibilidad.

Lejos de ser poético,  tiene una posición analítica de  supuesto al saber. Se vuelve creíble en el nombre del Otro, del inconciente.

Elaboración de  escritos, que inscriben experiencias de las propias vivencias, del encuentro con la clínica y con lo real de la práctica, en tanto la escritura es trabajo con las diferencias y trabajo con la memoria, producción de pensamiento  y destrucción de todo origen. Es efecto indefinido de pérdida y deuda. La obligación de la escritura es ser algo que pasa, que pasa indefinidamente.  Trasciende de entrada en el espacio y en la duración, y se difunde allí donde haya un lector y  por lo tanto la escritura es máximo compromiso del sujeto en el lenguaje.

(1)   Texto Experiencia y pobreza-Discursos Interrumpidos 1- Ed Taurus.

(2)   El juego, una deuda del psicoanálisis. Cristina Marrone. Ed Lazos.

(3) Historia y Psicoanálisis- Michel DE Certeau.